Desde la Cátedra Libre de Derechos Humanos de la UNTDF expresamos nuestro repudio a la represión ocurrida el pasado 12 de junio, mientras el Senado de la Nación debatía la sanción de la Ley “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” impulsada por el Gobierno Nacional.

En el contexto de esa represión se realizaron por parte de la Policía Federal y de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires 33 detenciones ilegales y arbitrarias bajo la carátula de "sedición", de las cuáles continúan aún 5 personas encarceladas.

La acusación del gobierno nacional de Javier Milei y de su ministra de seguridad Patricia Bullrich calificando a los manifestantes de “terroristas” que intentaban realizar "un golpe de Estado moderno" es una operación deliberada para reforzar un mensaje contra la protesta social y el derecho a la libre organización, atentando de esta manera contra la libertad de expresión contemplada en nuestra Constitución Nacional.

Entre las personas detenidas hay estudiantes universitarios de la UBA, de la UNSAM, la UNAHUR y la UNGS. Sus familiares y amigos denunciaron que sufrieron agresión y humillación por parte de las fuerzas de seguridad durante todo el proceso de detención y encarcelamiento.

Estas detenciones se producen en un marco de persecución política a sectores opositores y apuntan a doblegar e ilegalizar la protesta social contra el gobierno de Javier Milei. De esta manera se pretende instalar el miedo a manifestarse, acallando las protestas y avasallando la libertad de expresión, valores propios de una sociedad democrática. Esas prácticas que buscan el disciplinamiento y la inmovilización social evocan al comportamiento de gobiernos autoritarios que apelan a la represión para llevar adelante un profundo ajuste económico y que buscan eliminar la oposición.  

Con estas acciones es el propio gobierno nacional el que atenta contra el estado de derecho y los valores democráticos, no quienes ejercen su legítimo derecho a la protesta.